Parkings en Tibidabo - Barcelona

¿Dónde aparcar para ir al Tibidabo?

La montaña comenzó a urbanizarse a finales del siglo XIX, transformándose gradualmente en uno de los rincones más inolvidables de Barcelona.

El barrio de Sant Gervasi-La Bonanova es el punto de partida para tu experiencia en el Tibidabo. Aquí encontrarás el Parking Cosmocaixa, en C. de los Cuatro Caminos, 89, 08022, Barcelona, localizado a los pies de la montaña.

Este parking del Tibidabo tiene un horario de 7 a.m. a 11 p.m., por lo que ofrece una amplia flexibilidad para adaptarse a todos los visitantes. Está perfectamente conectado a la Ronda de Dalt, un acceso esencial para llegar al funicular del Tibidabo que se encuentra a tan solo 15 minutos caminando.

Dispone de espacios reservados para personas con movilidad reducida y, para facilitar aún más tu experiencia de estacionamiento, un panel indica de manera precisa la cantidad de plazas libres. Además, tiene cobertura móvil en el interior. Por último, debes saber que puedes reservar en este parking del Tibidabo con total libertad y comodidad.

¿Cómo llegar al Tibidabo desde el parking?

Aunque se puede llegar en coche hasta el aparcamiento de la cima del Tibidabo, es aconsejable dejar el vehículo en el parking Saba Cosmocaixa y ascender hasta la cumbre en el funicular del Tibidabo. A medida que comiences a escalar la montaña progresivamente, podrás disfrutar de unas vistas panorámicas únicas de Barcelona. Además, tienes a tu disposición líneas de autobús en Pg. Sant Gervasi (a tan solo 5 minutos caminando del parking) que te conectan con el centro de Barcelona de manera eficiente.

¿Qué hacer en la montaña del Tibidabo y en sus alrededores?

Una vez que hayas bajado del funicular, te adentrarás en la montaña más emblemática de Barcelona. Lo primero que captará tu atención es el parque de atracciones del Tibidabo, fundado en el año 1901. A lo largo del tiempo, este parque ha sabido conservar su encanto retro, pero al mismo tiempo ha incorporado atracciones modernas para que visitantes de todas las edades puedan disfrutarlas.

Una visita obligatoria es la impresionante Torre de Collserola, una antena moderna de telecomunicaciones diseñada por el arquitecto Norman Foster. Inaugurada en 1992 con motivo de los Juegos Olímpicos de Barcelona, esta torre cuenta con un mirador en su cima que se alza a 268 metros de altura y ofrece vistas panorámicas de Barcelona.

Si has encontrado el parking en Tibidabo y quieres completar una inolvidable experiencia, es aconsejable visitar el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón y el Observatorio Fabra.

El Templo Expiatorio del Sagrado Corazón es de estilo historicista, combinando elementos neobizantinos, neorrománicos y neogóticos. Está elaborado con piedra de Montjuïc y cuenta con una doble escalinata que es un marco espectacular para hacerse una fotografía. Además, si buscas con detenimiento, encontrarás una ermita del 1886.

El Observatorio Fabra fue diseñado por Josep Domènech i Estapà y construido en el año 1901, bajo la iniciativa de Camil Fabra, Marqués de Alella. En la actualidad, este observatorio continúa la labor de investigación científica meteorológica, sismológica y astronómica. Se puede decir con exactitud que se encuentra a 413 metros sobre el nivel del mar y es uno de los lugares más mágicos del Tibidabo.